martes, 30 de diciembre de 2008

POSTAL DE ÉVORA







Desde Cartagena nos llega este hermoso regalo de Navidad. Se trata de NÓMADA, ópera prima de mi buen Juan de Dios García, artífice y responsable – muy responsable – de la revista EL COLOQUIO DE LOS PERROS, donde habitualmente le echo una mano.
Abre uno sus páginas, las huele, después de la maceración y la crianza del libro, se topa con poemas ancianos sabiamente madurados y reorganizados. Los que sabemos del trabajo que este libro ha sufrido, de los insomnios y del dolor que en el se oculta (el dolor de la celebración más alta de la vida y de la literatura) agradecemos el esfuerzo.
De repente, nos topamos con “Postal de Évora”, cuya dedicatoria reza así:
“(…) a Ángel Gómez Espada y Sonia Marques. Aunque acabemos allí, todo empezó en Duluth, Minnesota” y el nudo en la garganta, tan emotivo, apuntala una amistad que – esperamos – permanezca eterna (o, al menos, tan probada como hasta ahora).

lunes, 15 de diciembre de 2008

DESDE SAIGÓN






Recibo en casa este fin de semana un par de ejemplares del número 10 de la revista Saigón, donde me han publicado un poema, “De los idiotas se aprende”, al lado de la siempre apreciada María Jesús Soler Arteaga. Para mí es un honor recibir tal dádiva de mi también apreciado Manuel Guerrero, saigonista de pro, quien me aprecia y me cuida muy bien.

miércoles, 10 de diciembre de 2008

AGRADECIMIENTOS (UN PAR DE ELLOS)

Pero hubo personas que apoyaron estos poemas desde el comienzo. A algunos ya los he nombrado. No quiero olvidarme aquí de Maricel Mayor Marsán de Baquiana, donde me publicaron en su anuario y en su número XV-XVI del año 2003. Ni de Gabriel Impaglione, que desde Isla Negra se acordó de ellos en varias ocasiones y los fue prodigando en su revista.

martes, 9 de diciembre de 2008

EXPERIMENTO

La decisión de publicar un libro a través de una editorial digital no ha sido fácil. Ha estado muy sopesada y, finalmente, lo he planteado como un experimento. No podría salir otra cosa de alguien que desde el año 2001 lleva apostando por Internet como una fuente de transmisión cultural incesante y prácticamente infinita (para los conceptos de infinitud que puede tener a día de hoy el ente humano, cada vez más finito). A través, ya lo saben, de la Revista de Literatura “El Coloquio de los Perros” y, desde 2005 con un blog de cierto éxito, “Rua dos Anjos Pretos”.
Así surge un libro que comienza a gestarse en 1999, y donde tiene un primer título como el de Elogio del Huésped. Por aquel entonces, recoge en su primera versión (podría atreverme a decir primitiva) el reconocimiento de un certamen como el Murcia Joven, donde queda finalista.
Con el devenir del tiempo y el reposo absoluto de sus personajes poéticos en un cajón a prueba de moho y hongos, va tomando diversos nombres, donde sigo jugando con la fórmula del huésped. En 2005 pasa por otra profunda revisión y pasa a llamarse Metamorfosis del huésped, que parecía definitivo.
Sin embargo, es como consecuencia de esta última metamorfosis del libro, realizada ex profeso para esta edición, que termina siendo Cocinar el Loto, título que resume algo más la transformación del poemario a lo largo de estos años, su acercamiento al universo homérico, su dualidad.
Más que una revisión fue una reescritura de cada uno de los poemas y de cada una de las secciones. Que se prolongó a lo largo de cinco semanas y que ha terminado su aventura en BUBOK.

lunes, 8 de diciembre de 2008

PRIMERA REFERENCIA AL LOTO

No podría ser de otra manera. La primera referencia al libro tenía que venir de mi querido Tucumán. Se atreve incluso, tan osado para sus cosas, a incluir un poema tan anciano como nuestro primer encuentro. Ganó en su día, junto con otros cinco, el premio Voces del Chamamé de Oviedo, que compartiera con mi también apreciado Emilio Batista Barcón.

EL POR QUÉ DE ESTE CUADERNO

La intención de este cuaderno no es otra que ir dando documentación al devenir que sufre todo libro una vez que sale a la venta, que existe y que demanda una función. Un libro cambia a su autor, o debería de hacerlo. Al igual que debería de mudar el pensamiento del lector o, por lo menos, sacudirlo.
No sé yo si Cocinar el Loto tendrá alguno de esos efectos.

domingo, 7 de diciembre de 2008

1.

Queda abierta la veda.